Suiza vuelve al semiconfinamiento

El Gobierno ha anunciado el cierre de los comercios no esenciales y ha decretado el teletrabajo obligatorio, así como la ampliación de los cierres de restaurantes e instalaciones deportivas, en un intento por reducir los contagios por coronavirus.

El Gobierno no ha ordenado el cierre de las escuelas como durante la primera ola de la pandemia la pasada primavera. Sin embargo, ha declarado que los cantones pueden cerrarlas si lo consideran pertinente.

“El número de contagios se mantiene alto y el riesgo de un rápido recrudecimiento es posible con las nuevas variantes del virus, mucho más contagiosas. En vista de la tensa situación epidemiológica, el Consejo Federal ha decidido, en su reunión de este miércoles 13 de enero de 2021, adoptar medidas adicionales para combatir la propagación del coronavirus”, han señalado las autoridades.

Por una parte, se prolongan las medidas adoptadas en diciembre: los restaurantes, los establecimientos culturales, las instalaciones deportivas y de ocio permanecerán cerrados hasta finales de febrero.

Además, Berna ha decidido adoptar nuevas medidas para reducir drásticamente los contactos: a partir del lunes 18 de enero, el teletrabajo será obligatorio, las tiendas que no vendan productos de consumo diario tendrán que cerrar, las manifestaciones y reuniones privadas estarán sujetas a nuevas restricciones y se reforzará la protección de las personas vulnerables en el lugar de trabajo.

“No fue una decisión fácil, pero el Consejo Federal ante la situación epidemiológica actual decidió prolongar las medidas dictadas hasta ahora”, indicó el presidente de Suiza, Guy Parmelin en la conferencia del 13 de enero de 2021.

De acuerdo al ministro de Salud, Alain Berset, en febrero se espera una tercera ola de infecciones de la COVID-19 más dura que las dos anteriores.

Para evitar dentro de lo posible un incremento de los casos, el Gobierno de Suiza busca reducir considerablemente los contactos.

Teletrabajo obligatorio

Esa es la norma, pero si el teletrabajo no es posible o solo lo es parcialmente, deben decretarse otras medidas en el lugar de trabajo: a fin de proteger a los empleados, será obligatorio el uso de máscaras en los espacios reducidos donde trabaje más de una persona.

También se han adoptado medidas específicas para proteger a las personas más vulnerables. Concretamente, tendrán derecho al teletrabajo o a una protección equivalente en el lugar de trabajo. Cuando su profesión no les permita respetar las disposiciones de protección, el empleador deberá eximirlos de la obligación de trabajar y pagarles el salario completo. En esos casos, los empleadores tienen derecho a la prestación por pérdida de ingresos por COVID-19.

Los eventos privados se limitarán a cinco personas, incluidos los niños. Las reuniones en el espacio público también se limitarán a cinco personas.

La industria hotelera y de restauración ha pedido más apoyo desde que los cierres entraron en vigor en diciembre. El domingo pasado, la organización paraguas del sector advirtió que la mitad de los negocios de hoteles y restaurantes de Suiza quebrarán a finales de marzo si no reciben una compensación financiera inmediata.

Hay algo de luz al final del túnel. El martes, el órgano regulador de medicamentos Swissmedic autorizó el uso “inmediato” de la vacuna producida por la compañía Moderna. Suiza ha encargado 7,5 millones de dosis, 200 000 de las cuales llegan hoy al país.

Fuente: Swissinfo

ANTERIOR

Moderna entregará a Suiza 7,5 millones de vacunas en lotes hasta mitad de año

SIGUIENTE

UBS anuncia el cierre en tres meses de 44 de sus 240 sucursales en Suiza

Los ‘secretos’ del dinamismo empresarial de Suiza

El año pasado, cada residente suizo realizó una media de 2,6 viajes con pernoctación y 8 viajes de un día. Esto supuso un aumento global del 30% en comparación con 2021. El total anual (21,1 EY publicado el pasado mes de mayo constata que catorce de las 500 corporaciones mundiales que más invierten en investigación y desarrollo (I+D) son suizas. El país centroeuropeo, de 8,8 millones de habitantes, fue en 2022 el noveno con mayor representación en un ránking liderado por las empresas de Estados Unidos –con Amazon en lo más alto del podio–, aunque en volumen total invertido Suiza ocupa la quinta plaza. Con sólo cinco compañías en el top 500, España figura en decimosexta posición.

Las multinacionales farmacéuticas Roche y Novartis, con una inversión de 16.000 millones y 9.500 millones de euros, respectivamente y, a distancia, el fabricante de semiconductores ST Microelectronics (1.800 millones), el gigante de la alimentación Nestlé (1.700 millones) y el grupo de ingeniería eléctrica y automatización ABB (1.100 millones) fueron las empresas helvéticas que más recursos destinaron a I+D en 2022.

Dos de estas cinco compañías, Novartis y Nestlé, recibieron en la segunda quincena de octubre la visita de un grupo de 40 empresarios catalanes de la asociación FemCat y de altos cargos de las mayores universidades de Cataluña con el objetivo de conocer sobre el terreno las mejores prácticas de Suiza en materia de empresa, investigación e innovación.

El programa incluyó también visitas a compañías de menor tamaño, como la relojera Panerai –propiedad del grupo Richemont–, los fabricantes de maquinaria Bobst y Mikron y la tecnológica EM Microelectronic –integrada en Swatch Group–, además de la Escuela Politécnica Federal de Lausana (EPFL) y el área de carga del EuroAirport, el aeropuerto francosuizo situado junto a Basilea. En la sede de Nestlé en Vevey, a orillas del lago Lemán, Lluís Cantarell, que fue vicepresidente mundial y máximo ejecutivo del grupo en Europa, Oriente Medio y Norte de África hasta 2016, dejó claro que la apuesta de la compañía por la innovación está íntimamente ligada a su condición de empresa suiza y puso en valor la colaboración público- privada en materia de I+D que existe en el país. La innovación se cuece a fuego lento en la multinacional de la alimentación, que, por ejemplo, lleva cinco años trabajando en el proyecto de sustituir el aluminio por el papel en las cápsulas del café Nespresso. “Si en las pruebas de calidad no llegas al 60%, no lanzas el producto”, detalla Cantarell, que preside actualmente la farmacéutica Uriach.

El sistema helvético de I+D tiene en su cúspide a los grandes centros universitarios, con la EPFL y la Escuela Politécnica Federal (ETH) de Zúrich a la cabeza , y se estructura a partir de seis parques de innovación repartidos por todo el país que colaboran estrechamente con las empresas.

De la salud a la robótica

La política de innovación de Suiza, un país que no tiene industria de automoción, gira en torno a cinco grandes ejes: salud y ciencias de la vida, ciencia computacional, energía y medio ambiente, movilidad y transporte, y manufactura avanzada y robótica.

Uno de los empresarios que visitó el país, Josep Lagares, fundador y presidente de la firma gerundense de maquinaria para la industria cárnica Metalquimia, considera que una de las claves del éxito de Suiza en el campo de la innovación es contar con “una red neuronal muy bien trabada” que permite compartir los conocimientos y que facilita la transferencia tecnológica.

En la misma línea, Manel Xifra, presidente la compañía catalana de bienes de equipo, Comexi, destaca la importancia de la “labor de interfaz entre los centros de investigación y las empresas”; mientras que David Marín, presidente de FemCat y CEO de Inacces Geotècnica Vertical, pone de relieve el “trabajo común” entre las universidades helvéticas y los centros de I+D.

El carácter estratégico que otorga el país a la innovación empresarial puede explicar por qué Suiza ha podido minimizar el impacto de las sucesivas crisis que han amenazaban su economía, como ocurrió con la irrupción del cuarzo en la industria relojera a finales de los años 70 y principios de los 80 del siglo pasado y, más recientemente, con el fin del secreto bancario en el sistema financiero suizo, tras el acuerdo de intercambio de información tributaria firmado con la Unión Europea en 2015, que entró en vigor tres años después.

Este año, la caída de uno de los dos mayores bancos del país, Credit Suisse, rescatado posteriormente por el otro gran grupo financiero, UBS, ha sembrado dudas sobre la fortaleza del que era uno de los puntales de la economía helvética. La crisis de Credit Suisse, sin embargo, no parece quitarle el sueño a los responsables de las empresas suizas reunidas con FemCat y ni siquiera a directivos del propio sector bancario, más allá del recorte de plantilla derivado del proceso de integración con UBS.

Junto con el apoyo a las grandes multinacionales, Suiza tiene en su ADN la protección de las pymes, hasta el punto de que cada nueva ley o normativa en el país debe superar, antes de su aprobación, un test para evaluar su impacto en las pequeñas y medianas compañías.

El tejido empresarial se completa con las start up, que florecen arropadas por el sistema universitario y de innovación. Una de ellas, Aktia, con sede en Neuchâtel, fue fundada hace cinco años por el emprendedor catalán Josep Solà, que ha desarrollado una pulsera inteligente para medir de forma permanente la presión arterial. Solà dice que llegó a esta “tierra de acogida” en 2004 y está levantando ahora una ronda de financiación de 22 millones de euros.

Escuelas de aprendices

Entre las mejores prácticas del sistema educativo y empresarial suizo que suscitan envidia sana entre los empresarios de FemCat está la figura de las escuelas de aprendices, un fenómeno ligado al prestigio del que goza la formación profesional en el país como vía para obtener un empleo.

Las empresas cuentan con sus propias escuelas, que se convierten en una cantera para ampliar y renovar plantillas. No es extraño que un alto directivo de una compañía iniciara su trayectoria como aprendiz. Stéphane Mader, por ejemplo, entró con 16 años en la escuela de la empresa de bienes de equipo Bobst y ahora es el director de márketing y comunicación de la compañía. El modelo suizo de acceso al mercado laboral explica en gran medida que su índice de paro juvenil se sitúe por debajo del 7%.

Fuente: Expansión / Autor: José Orihuel

ANTERIOR

Por qué algunos extranjeros deciden no votar en Suiza

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR