En 2018 la exportación de relojes suizos creció un 6,3% hasta alcanzar la barrera de los 21 000 millones de francos. El aumento se debe sobre todo a los mercados asiáticos y se espera que también continúe este año, a pesar de las incertidumbres a las que se enfrenta la economía china.
Los relojeros suizos aprovecharon el año pasado la fuerte demanda de Extremo Oriente para obtener el quinto mejor resultado anual de su historia: el 19,1% de las exportaciones a Hong Kong (3000 millones de francos en total) y el 11,7% a China (1700 millones de francos), según cifras que la Federación de la Industria Relojera Suiza (FH) ha publicado recientemente.
Además de las adquisiciones que los turistas realizan en el extranjero, algunos especialistas creen que un ciudadano chino compra uno de cada dos relojes Swiss Made vendidos en el mundo. Una progresión que, en palabras del presidente de la FH Jean-Daniel Pasche, continuará. “A pesar de un crecimiento más lento y de los riesgos asociados a la guerra comercial entre Estados Unidos y China, la clase media china sigue creciendo y su fascinación por los relojes suizos sigue intacta”, ha declarado a swissinfo.ch.
De cara al año en curso, el presidente de la FH muestra un “optimismo moderado”. Las exportaciones de relojes deberían seguir creciendo, pero a un ritmo que dependerá de distintos factores geopolíticos como, entre otros, el Brexit, el auge del nacionalismo o el proteccionismo en diversos países.
Este es especialmente el caso de Brasil, donde la llegada de Jair Bolsonaro al poder genera gran incertidumbre. “En este contexto, es esencial anclar el libre comercio en los acuerdos bilaterales. Esperamos que las discusiones con los países del Mercosur [Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay] pronto se traduzcan en un acuerdo de este tipo”, subraya Jean-Daniel Pasche.
El presidente de la FH también acoge con satisfacción el acuerdo de libre comercio alcanzado a finales de 2018 con Indonesia. Y asimismo recibe con agrado la voluntad del Gobierno suizo de reabrir las negociaciones con los Estados Unidos para llegar a un acuerdo similar.
La buena salud de la industria relojera suiza se refleja también en el número de empleados con que cuenta el sector. En las cerca de 700 empresas dedicadas a fabricar relojes, se han generado cerca de 3 000 nuevos puestos de trabajo en un año, según las cifras que el Acuerdo de la patronal de la industria relojera suiza (CPIH) ha dado a swissinfo.ch.
“Se esperaba un aumento del empleo en la industria relojera, aunque su alcance nos ha sorprendido. Es ciertamente impresionante teniendo en cuenta que el personal temporal no está incluido en nuestro censo”, resalta Ludovic Voillat, portavoz del CPIH.
Un aumento de casi un 4%, que prácticamente compensa las pérdidas habidas entre 2015 y 2018. Con 57 800 puestos de trabajo reconocidos, esta cifra no dista mucho de los récords registrados (casi 60 000 puestos de trabajo) en 2014, año de referencia para la relojería suiza desde su reorientación hacia el sector del lujo, a principios de la década de 2000.
“Esto demuestra que, a pesar de las incertidumbres que pesan sobre la coyuntura mundial, los relojeros confían en el futuro”, afirma Ludovic Voillat.
El personal relojero –cada vez más cualificado– no está sufriendo la creciente automatización que en los últimos años se ha observado en el sector, señala el representante del CPIH. “Las empresas relojeras necesitan, más que nunca, experiencia manual. Al contratar empleados fijos, se aseguran de que tienen las habilidades necesarias en la empresa”, indica.
Cifras récord en el comercio exterior
El pasado año la incertidumbre económica mundial afectó al comercio exterior suizo. Así, las exportaciones suizas aumentaron un 5,8% (el mayor incremento desde 2010) hasta llegar a la cifra récord de 233 100 millones de francos. Y ocurrió lo mismo con las importaciones, que aumentaron un 8,6%, hasta alcanzar los 201 800 millones de francos.
Según informó la Administración Federal de Aduanas (AFD), el ejercicio 2018 terminó con un superávit comercial de 31 300 millones de francos, 3 490 millones menos que en 2017.
Autor: Samuel Jaberg
Traducción: Lupe Calvo
Fuente: SwissInfo.ch
Foto: Unsplash