Las empresas de la Confederación Suiza son muy competitivas pero necesitan herramientas 4.0 que les ayuden a mejorar su productividad y acceder a nuevos mercado.
Suiza es uno de los países más competitivos e innovadores del mundo. Sin embargo, las pequeñas y medianas empresas de esta Confederación reconocen la importancia de la digitalización para mejorar sus modelos de negocio. Necesitan herramientas y productos virtuales para ganar en productividad y acceder a nuevos mercados, lo que supone una excelente oportunidad para las compañías extranjeras y tecnológicas.
Gracias a su alto nivel de educación, la mano de obra cualificada y la investigación puntera, algunas empresas de renombre se han establecido allí: Google, eBay y Disney. Las pymes suizas necesitan tanto de las grandes como de las entidades digitales más pequeñas para expandir las relaciones con los clientes y aprovechar canales de venta, como el comercio electrónico y el márketing.
Además, las condiciones que establece el Gobierno para las iniciativas del sector digital son óptimas. Por ejemplo, el programa Digitalswitzerland reúne a diversas autoridades públicas y a más de 130 entes privados para emplazar al país como un centro para las compañías tecnológicas, según el estudio Guía para invertir en Suiza realizado por Switzerland Global Enterprise (S-GE) con la participación de la Secretaría de Estado para Asuntos Económicos (SECO).
Impuestos atractivos
Establecerse como empresa en este país es fácil y seguro, gracias a su estabilidad política y financiera. El proceso de constitución legal dura entre dos y cuatro semanas, y el coste puede oscilar entre los 1.750 y los 7.000 euros.
Gracias a la libertad económica, cualquier persona física o jurídica puede desempeñar, participar o emprender una actividad. El único requisito es que el socio representante debe tener obligatoriamente residencia en el país.
El sistema tributario también es atractivo: los impuestos son recaudados por la Confederación, los cantones y los municipios. Esta competencia fiscal interna contribuye a que la carga sea baja. En concreto, las empresas pagan por sus rendimientos una tasa general del 8,5% a nivel federal, según el ICEX. El Impuesto de Sociedades (IS) es el mismo para las entidades extranjeras, aunque algunos cantones ofrecen tipos especiales para atraer inversores.
En virtud del Convenio de Doble Imposición Hispano-Suizo, firmado en 2011, la retención máxima que se aplica a los dividendos pagados por sociedades residentes en Suiza o en España varía entre el 0% y el 15%, en función de si el receptor posee al menos el 25% del capital.
Cultura empresarial
Para los directivos suizos, el orden y la disciplina son fundamentales. No es necesario establecer conversaciones previas pero en las negociaciones prefieren que se vaya al grano, sin ser demasiado agresivos. Tienen mucho talento y hablan varios idiomas. A los suizos no les gusta regatear, por eso hay que ofrecerles un precio justo.
Población: 8,4 mill/ hab.
PIB: 601.396 millones €
PIB p. cápita: 70.901 €
Crecimiento PIB: 1,1 %
Tasa de desempleo: 4,4 %
Los sectores de oportunidad son: químico, farmacéutico, metalúrgico, agroalimentario, TIC y electrónico.
Las exportaciones españolas en 2017 ascendieron a 4.100 millones de euros, lo que supone 654 millones más respecto al año anterior.
Suiza invierte más del 3% del PIB en I+D. Figura entre los dos países con más premios Nobel per cápita.
Su sistema educativo ocupa el primer lugar en el Índice de Competitividad por el Talento Global de INSEAD. La mano de obra es plurilingüe, tienen 4 idiomas oficiales
Autor: Catarina Valente
Fuente: Expansión